Gracias a los sensores de huella dactilar podemos desbloquear nuestro teléfono en un instante, pero, ¿cómo funcionan? ¿Son realmente seguros?
Este tipo de seguridad biométrica nos ha hecho la vida más simple, justo como nos gusta, y para algunos se ha hecho una característica indispensable.
Año tras año se han ido mejorando para lograr la mayor precisión y seguridad y para que no solo sirva para desbloquear el móvil. Por ejemplo, en el Samsung Galaxy S6 Edge Plus, que ya tiene dos años, también se puede utilizar para pagar desde el móvil.
El sensor también reconoce gestos, como en algunos Huawei. Deslizando el dedo se puede acceder directamente al panel de notificaciones, coger una llamada o pasar fotos en la galería.
¿Cómo funciona el lector?
Los lectores de huellas funcionan de tres maneras diferentes:
- Ópticos – Como una cámara de fotos, y sus sensores captan las zonas más claras y oscuras de tu dedo para crear un mapa de la huella.
- Capacitivos – Son los más usados, y se basa en condensadores que reciben energía a través de los minúsculos salientes de las huellas.
- Por ultrasonidos – Es la última tecnología en aparecer y la más precisa y rápida. Como bien dice el nombre, funciona por ultrasonidos que se envían a la huella y se recogen las diferentes intensidades. Así, se puede crear una huella en 3D y se consiguen los resultados más precisos y, especialmente seguros.
¿Cómo configurar las huellas?
Todos los smartphones con lector tienen su propio submenú en Ajustes. Allí puedes añadir otras huellas para que tu pareja se pueda meter o para que puedas utilizar otro dedo. Añadir la huella es muy sencillo: solo tendrás que levantar y apoyar el dedo varias veces, para que lo reconozca por completo.
En caso de que el lector falle, puedes añadir un segundo método para desbloquearlo, como una contraseña escrita.
Según el dispositivo, podrás activar otras características, como se puede ver en la imagen.
Posición del sensor de huella dactilar
Fabricantes como Apple y Samsung tienen situado el lector en el mismo botón de inicio frontal, al que podemos acceder fácilmente con el pulgar.
El Huawei P9 y su serie Mate, por ejemplo, lo tienen en la parte de atrás. Aquí se usa el dedo índice y es especialmente cómodo en dispositivos grandes. El lado negativo es que si está en una mesa, siempre tendrás que cogerlo para consultarlo.
En este caso también es muy importante la colocación, una de las críticas al Samsung Galaxy 8. Lo tiene colocado justo al lado de la cámara trasera, así que muchas veces se meten los dedos en ella. Para compensarlo, han añadido un escáner de iris, una tecnología que ya han incorporado otros fabricantes.
Unos cuantos lo tienen en un lateral, como la mayoría de los móviles Sony. Pero claro, ¿y los zurdos? Ya no es tan sencillo para ellos. ¡Lo ideal sería que probaras varios para ver cuál te parece más cómodo!
Como nos gusta mirar hacia el futuro, ya sabemos en qué están trabajando los fabricantes: lectores de huellas bajo la pantalla, sin ocupar espacio ni ser visibles. Vivo ya ha mostrado el primer prototipo, y, aunque es algo más lento, parece que funciona bien. La pregunta es: ¿Cuánto tardará en llegar? Y sobre todo, ¿se quedará en los gama alta? No lo sabemos. ¡Lo que está claro, es que en Lowi os seguiremos trayendo todas las novedades!